Señores y señoras... ¡Sean ustedes bienvenidos!

El bebé recién nacido llora de desconsuelo al darse cuenta de que ha dejado atrás su pequeña cueva de comfort y ha llegado el momento de enfrentarse al exterior. Llora y gime mientras es acariciado y limpiado por una desconocida con un horrible tapabocas. Grita "¡Epa, qué confiancitas, ¿eh?!" y parece no ser escuchado siquiera. Observa horrorizado cómo un energúmeno de cabeza cubierta lo ataca con unas tijeras, cortando de tajo toda conexión con su yo anterior. "¡Eh, no tires eso! ¡Planeaba disecarlo! Ah, mierda... ¿Qué aquí nadie habla español?" Aquel asesino de cordones umbilicales le dice después a su madre, como si todo estuviera bien: "Su hijo está perfectamente sano."

¿Sano? ¿Es acaso una broma? Al pequeño le acaban de horadar el ombligo sin anestesia general, lo trajo al mundo un hombre que vive de toquetear las partes privadas de su madre, su papá coquetea con la enfermera pidiéndole un baño y el trauma que le causará que su primer contacto físico con alguien haya sido una nalgada será irreparable... Ajá, el niño está perfectamente sano, ¡y si mi abuelita tuviera malta sería un corn flake!

A primera vista, el mundo parece aterrorizante. ¿Podrá acaso el niño crecer a salvo? ¿Se convertirá en un flamante empresario o venderá pastillitas de menta en el metro Etiopía? ¿Conseguirá una novia hermosa e inteligente o terminará presumiendo un estandarte con el lema "Hoyo... aunque sea de pollo"? ¿Tendrá una familia feliz o su padre conseguirá al cabo de unos pocos años aquél tan deseado baño de esponja? Todo esto (¡y más!), descúbralo en ...Y si mi abuelita tuviera malta, sería un corn flake..., éste, su blog, mi blog, nuestro blog... no, de hecho sí es mío.

domingo, 30 de mayo de 2010

Sobre el insomnio

¿Qué es exactamente el insomnio? ¿Es físico y tangible? ¿O es abstracto y escurridizo? ¿Es un estado del ánimo? ¿Es una enfermedad venérea? ¿Es un pretexto? Es probable que nadie pueda dar una respuesta satisfactoria a estas preguntas, pero lo que no se puede negar es que el insomnio está entre nosotros. ¿Cómo reconocerlo? No es una tarea fácil.
    Su primera característica es que es un animal nocturno, comparte vida con gatos y murciélagos, y sale a cazar cuando sus víctimas andan babeando la almohada. Es un efectivo cazador, pues sabe que no existe mucha posibilidad de resistencia de parte de los somnolientos vocadillos (sí, vocadillos con "v" chica porque ya me cansé de escribir como se debe).
    Su segunda característica es su eclecticismo, pues no discrimina a la hora de elegir: desde niños a viejos, desde perros a pulgas, todos pueden caer bajo el influjo de este terrible depredador (excepto los osos perezosos, claro, pero a ellos no se les toma en cuenta como seres vivos).
    Su tercera y más importante característica es su curioso modo de ataque. El insomnio utiliza casi siempre el canal de los sueños para abalanzarse contra el objeto de su elección. De esta manera induce al atacado a que despierte. Digamos, por ejemplo, que la víctima está soñando con una fiesta. Repentinamente, comienzan a aparecer exquisitos manjares en una mesa que se encuentra en la esquina de la habitación (sí, la fiesta se ha convertido en un abrir y cerrar de ojos en una reunión en algún cuarto de un hotel barato). El que sueña se encuentra al otro lado de la habitación y ve materializarse poco a poco una pierna de jamón serrano, luego un puerco al horno, luego una manzana en la boca del puerco, luego un gusano en la manzana en la boca del puerco, luego unos cortes argentinos, luego frutas exóticas, luego un bebé al ajillo, luego un payaso que mastica una pata de pollo. Después se percata de que han aparecido tres de sus alimentos favoritos: pato a la orange, cordon blue y vino blanco. Para entonces su estómago comienza ya a crujir y a pedir ayuda desesperadamente. El que sueña intenta acercarse a dichos alimentos, pero sus pies parecen clavados al suelo. Efectivamente, al mirar hacia abajo se da cuenta de que un chimpancé ha clavado sus pies al suelo. Se pregunta: "¿Habrá usado clavos oxidados?" Por suerte, un doctor está en la fiesta (sí, han regresado a la fiesta como por arte de magia) y le aplica seis inyecciones de arroz con leche. Ya tranquilo, voltea hacia la mesa donde se encontraba el banquete y repara en tres ingenieros agrónomos obesos que se atragantan con lo que hay de comer (¿Cómo rayos sabe que son ingenieros agrónomos? Sólo el sortilegio del onirismo puede saberlo).Se le empieza a hacer agua la boca y acto seguido se comienza a ahogar dentro de su propia boca. Entre la desesperación del ahogo y la desesperación del hambre, el insomnio, con todo éxito, logra despertar al perjudicado.
    Éste es el primer paso que lleva a cabo el insomnio para conseguir un ataque victorioso. Ahora el dormido está despierto y ha llegado la hora de mantenerlo en ese estado. ¿Qué sigue? Una intensa actividad neuronal. El insomnio hace todo lo posible para que el ahora despierto comience a pensar demasiado, cosa que no es nada difícil, a decir verdad. Lo único que el atacante debe de hacer es recordarle lo que sucedió en el día con un ligero toque dramático. Pongamos un ejemplo: la víctima estuvo en compañía de una linda chica esa misma tarde, compartiendo risas y buenos ratos. Mientras deambula de un lado a otro de su habitación, intentando relajarse para volverse a dormir, se le mete en la cabeza la idea de que es probable que le guste a esa chica. Acto seguido, empieza a medir los pros y contras y se hace un lío tremendo, pues la chica es su mejor amiga, no quiere lastimarla si todo sale mal, su hermano es un vándalo y le puede hacer daño, a uno de sus amigos también le gusta, etc. Este tipo de dudas bastan para mantener al animal enjaulado en vigilia. Comienza a sudar, va al baño, se toma un vaso de agua, se echa un cigarrito, y se acuesta en su cama a jugar al remolino (a dar vueltas, pues).
    ¿Cuáles son los alimentos del insomnio? El estrés, la tensión, la duda, la gastritis... Y cabe recalcar que este acechador noctámbulo no tiene llenadera. ¿Es lo mismo padecer insomnio que padecer sonambulismo? El Doctor Schwomfeld nos explica por qué no:

-Señor Entrevistador: Doctor Schwomfeld, ¿cuál es exactamente la diferencia entre el insomnio y el sonambulismo?
-Doctor Schwomfeld: Mira, son realmente muy parecidos, pero básicamente tienen un detalle que los diferencia completamente.
-S. E: ¿Ah, sí? ¿Y cuál es?
-Dr. S.: Que en el insomnio uno está despierto, y en el sonambulismo uno está dormido.

    Gracias, doctor, por abrirnos los ojos en esta, la noche más aciaga. Sólo nos queda una cosa más por añadir en esta entrada: ¿existe una solución al insomnio? ¡Por supuesto! La solución es no pensar en absolutamente nada, dejar la mente en blanco, vaciar el disco duro encefálico. Esta misma entrada fue hecha como un contraataque, por lo que usted puede leerla para no pensar en nada. El texto está diseñado para que, al ser leído, inmediatamente el lector quede sin absolutamente nada en la cabeza. Por supuesto está el riesgo de que nunca vuelva a aparecer nada por ahí arriba, pero es un riesgo que vale la pena tomar. ¿Qué es preferible, pensar o dormir? Dormir es definitivamente más cómodo...

...Y si mi abuelita tuviera malta, sería un corn flake...

    Muy buenas noches, queridos lectores, y dulces sueños.



-Advertencia: La mayor parte de esta entrada fue escrita a las cuatro de la mañana. Si usted la ha leído, lávese los ojos con tíner, queme su computadora y llame a un exorcista. A menos, claro está, que le guste estar en estado vegetal. Nada de lo que está escrito aquí es verídico, sino puramente hipotético. Los ejemplos son meras invenciones sin fundamento alguno (como todo lo que el autor dice, escribe y hace). Gracias por su compresión, digo, comprensión.

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